domingo, diciembre 23, 2007

El Culpable es el Vanidoso

Me encontré hoy con el siguiente post en el blog de mi querido amigo Ricardo, proponiendo un problema que yo replico para todos ustedes.

Reinado de belleza

Lucas De Zubiría, periodista inteligente, está en el reinado de belleza de Cartagena desde hace un par de semanas. Lo odia. Lo odia a muerte. Se siente un viejo verde con un hijo adolescente y una esposa que no ha descubierto aún sus infidelidades. Y, para no aburrirse, para no cansarse con esas niñas de 18 años que se hacen las vírgenes y las naturales, ha decidido pedirles que respondan quién es el asesino en el siguiente caso:

1) Una ESPOSA se consigue un AMANTE porque su ESPOSO se ha dedicado a trabajar todo el día desde hace mucho tiempo.

2) La ESPOSA se ve todos los días con su AMANTE. Pero, para llegar a la casa en la que se encuentran, debe pagarle una buena suma de dinero a un BARQUERO que se encarga de llevar a la gente de un lado del río al otro.

3) Un buen día a la ESPOSA se le acaba el dinero. Va a ver a su AMANTE. Pero el BARQUERO le dice que si no le pasa no la lleva al otro lado.

4) La ESPOSA decide, entonces, tomar el larguísimo camino del bosque. No lo tomaba por lo largo, claro, pero también porque todo el mundo sabe que allí hay un LOCO que asesina a la gente que se encuentra por el camino.

5) La ESPOSA entra al bosque. Se encuentra con el LOCO. La mata.

¿Quién tiene la culpa de su muerte? ¿El LOCO, el BARQUERO, el AMANTE, el ESPOSO, la ESPOSA? ¿En qué orden tiene la culpa de mayor a menor?

Que cada quién diga su orden. Una pista: las reinas han dicho que la culpa es del loco.


Como es de mi interés conocer su respuesta tanto como exponerles la que yo humildemente he pensado, aquí un par de fotos de estos días antes de mi respuesta, para que se tomen el tiempo de contestar.

Foto otoñal corrida

Con un amigo (la flecha indica cual soy yo)

Ahora mi respuesta:

Ante un problema humano, que reviste de tanta complejidad, es necesario hacer un análisis comedido antes de aventurarse a dar un remedo de dictamen.

Lo primero es el asunto de la culpa. En su busqueda el objetivo es establecer un grado de responsabilidad respecto a los hechos. Sin embargo , una situación de daño puede variar si este es deliberado, sin intención o producto de negligencia. De alguna manera todos y cada uno de los personajes encajan en una o varias de estas categorías y con esa base podemos ya acercarnos a nuestro examen.

Si seguimos la tradición occidental, los loco carecen de alma, de dominio del si, como bien muestra Michel Foucault en su "Historia de la locura en la edad clásica". Debido a esta concepción, aunque el LOCO haya ejecutado el acto del asesinato no puede ser responsabilizado de nada. El lector desprevenido estaría tentado a hurgar en la locura del personaje, pero dados los datos no tenemos otra opción más que relacionar al LOCO con otro de los personajes para dar una respuesta.

Las parejas LOCO-AMANTE y LOCO-ESPOSO comparten una concepción moralista de justicia-venganza o crimen-castigo. No son excluyentes - lo que da para que los más adelantados teman una conspiración AMANTE-LOCO-ESPOSO - pero comparten un sentido de merecimiento que de cierta manera los expía, o por lo menos los inscribe en la categoría de los 'inintencionados', mientras señalan a la ESPOSA.

Dicha pareja, ESPOSA-LOCO, propone una inmersión psicológica en el comportamiento de la occisa, pasa del tedio a la lujuria, y finalmente al desespero, con lo que se podría concluir que de cierta manera se trató de un suicidio. Un poeta barato podría decir que 'en los bosques de nuestra mente siempre hay un LOCO que amenaza con matarnos'. El problema con este supuesto es que, aunque la categoría de ESPOSA le asigna cierto uso de razón, el desenlace nos lleva a suponer lo contrario, arrastrando en ello al ESPOSO y al AMANTE por negligencia. No obstante, esta complicación no tiene fundamento en nuestro problema, con lo que se ata por deliberación a la pareja ESPOSA-LOCO y asciende ligeramente en la psuedo escala de culpabilidad por la que pregunta el enunciado.

Para este momento ya habrá notado el lector que una pareja parece inexistente, o por lo menos inviable, BARQUERO-LOCO, asunto que requiere nuestra más afilada consideración. Hannah Arendt, cuando habla de la banalidad del mal en la acción de las cámaras de gaseo durante la segunda guerra mundial, nos recuerda como el sistema puede enmascarar y difuminar la culpa de actos horrorosos. Es a través de esta perspectiva que saltan a nuestra atención como la existencia de un LOCO asesino se de por descontada con tanta ligereza, mientras que el BARQUERO, en su comportamiento 'business as usual', se libra de todas las miradas mientras se limita a hacer su trabajo. La negligencia estructurada resulta entonces cercana al genocidio y a la peor de las racionalidades económicas, en un mundo donde no sólo los AMANTEs-ESPOSAs-ESPOSOs no pueden arreglar sus problemas entre ellos, sino que cualquiera que no posea dinero suficiente es condenado a desaparecer dentro de la tiranía sutil de la institución BARQUERO-LOCO que inunda el transfondo del problema.

Espero, de alguna manera, haber dejado clara mi opinión.


Que la pasen bueno adorando sus dioses.

Desde el reflejo,

panÓptiko

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Luego le digo mi opinión; por ahora dejeme desearle que el próximo año este colmado de felicidad y exitos.

Un Abrazo

KUAI

Anónimo dijo...

Dar epítetos en lugar de nombres nos puede hacer pensar, erróneamente, que nos dan más información de la que nos dan en realidad. Mi teoría, es que no se trata de cinco personajes. Pueden ser tres, cuatro o incluso dos.

En la versión de cuatro el Esposo es un Barquero. Ese es el trabajo al que le dedica tanto tiempo. Y tan dedicado es que incluso le niega el paso a su propia esposa, porque pone primero la ética profesional. Eso la lleva a la muerte a manos del Loco de la misma forma que la llevo a la infidelidad a manos del Amante y toda la culpa es suya.

En la versión de tres el Esposo es Barquero y el Amante es un Loco. Vive del otro lado del rio y del bosque para que le sea más fácil salir a matar. Su sotano está lleno de cadaveres de mujeres a las que ha seducido. Él sabe lo estricto que es el barquero y parte de su MO es hacer que eventualmente se queden sin dinero y deban vagar por el bosque. Todo es una trampa para atrapar a su presa más preciada: la esposa del Barquero. La culpa es suya.

En la versión de dos el Esposo Barquero, cansado de que su relación se vea arruinada por su trabajo, le propone a su esposa encuentros furtivos en el trabajo; eso que llaman las parejas 'juegos de roles'. Pero el Esposo Barquero Amante está al borde de la locura debido al estress de su trabajo y su mujer no lo sabe. El juego de roles lo termina de empujar al abismo de la locura y lo que empieza como otro encuentro actuado con su esposa para un lance emocionante en el bosque, con todo y sesión de SyM termina en un brutal asesinato. La culpa es obiamente suya.



Ahora, que si de verdad hay cinco personajes, entonces la culpa es del Loco. Porque si las reinitas lo dicen, ha de ser cierto.